domingo, 12 de febrero de 2012

La Eternidad y Un Día, Tonino Guerra, Petros Markaris, Theodoros Angelopoulos, 1998



  • Parece que la realidad copia a la ficción, hoy que Grecia anda revuelta.  Parece que se lanzan de nuevo preguntas y que esta película viene a responder algunas, y no las más sencillas sino las profundas, las que nadie quiere contestar. He aquí el trailer.
  • Dolor, expiación, despedidas... pero también ternura, amor en letras grandes y sinceridad existencial. Esta es su ficha técnica.
  • Y estos, a parte del director de la película, dos de sus guionistas. Uno, y OtroQue tienen sus fichas en wikipedia, aquí y allí A los que debemos algunas de las reflexiones sobre la madre, la amada, la mujer, la amiga, el yo, la soledad, la creación... que se vierten en este film. Un artículo a la muerte del director, escrito por uno de sus guionistas. Y otro sobre el fallecimiento del guionista, RIP.
  • La película tiene su entrada particular en wikipedia. Donde se puede leer el argumento, pero no disfrutar con los maravillosos planos generales que nos obligan a plantearnos algunas cuestiones de tipo ¿qué? del tipo ¿para qué?, y a pesar del miedo que tienen los niños, del miedo que tienen los adultos a las respuestas... La película entrega algunas de ellas también en plano general. A grandes cuestiones grandes respuestas. 
  • Para los estudiosos, en las muchas cuestiones filo-psico-existencial que plantea la narración, un estudio en pdf
  • Y el cartel (del blog palomitas con chocolate donde se pueden leer algunas frases de la película y un comentario ).



2 horas y 10 minutos para dejarse mecer por una árida Grecia, no menos que la actual. Cuna del pensamiento y a la que algunos financieros quieren convertir en tumba también del discurrir europeo (pero no saben que el futuro
dura la eternidad y un día y podemos dar la vuelta a esta tortilla suya que no nos gusta nada).

Disfruten en pantalla grande, con atención a los diálogos, reflexiones y sin miedo, sin esa parálisis que provoca el miedo (y que tan bien se reflejan en algunas escenas de este maravilloso recorrido interior).

¡Concédanle unas horas! Serán recompensados. 

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